A menudo se dice que, según su comportamiento, el gato siamés se parece más a un perro que a un gato. Quizás esta afirmación no sea del todo cierta, pero lo que sí es verdad es que es muy cariñoso, inteligente, curioso, de entrenamiento fácil y amante de la diversión, rasgos que obviamente también son propios de los perros.
Los gatos siameses generalmente son de buen carácter y tienen una fuerte necesidad de vincularse con los seres humanos. Cuando son criados en un hogar amoroso, suelen desarrollar fuertes apegos a sus familias. Esto se extiende a los perros y otros gatos que vivan en sus hogares, en particular a los demás miembros de la raza.
Comportamiento del gato siamés en torno a sus dueños
Un aspecto del comportamiento del gato siamés típico de la raza, que es de hecho una característica genética, es que le encanta sentarse y cabalgar sobre los hombros. Si te utiliza como su columpio o no, no importa, a tu gato siempre le gustará estar cerca de ti.
También adora sentarse cómodamente en la cocina mientras se está haciendo la cena. Esto le da un buen punto de observación sobre su dueño y sobre cualquier pedacito de comida que caiga al suelo.
De manera general muestra un gran interés en todo lo que podrías estar haciendo alrededor de la casa y fuera de ella, como el planchado, la jardinería, caminar por el centro comercial y trabajar en la computadora.
El entrenamiento de tu gato: comportamiento aprendido
Los gatos siameses son inteligentes, enérgicos y les encanta la interacción humana. Esto los hace muy fáciles de entrenar. Son buenos con los trucos de aprendizaje, especialmente los autodidactas, como abrir las puertas del refrigerador, y es muy posible enseñarlos a caminar con un arnés.
Si quieres que tu gato tenga una vida al aire libre, entrenarlo es una buena forma de empezar, ya que podrás dejarlo andar por tu jardín o el vecindario con mayor seguridad.
Hay quienes recomiendan entrenar al gato para que responda a un silbato para perros. Esto es particularmente útil cuando se tiene un gato al aire libre, llega la noche y ya quieres que venga hacia el interior para darle su cena.
Comportamiento durante el juego
Los gatos siameses disfrutan jugar y se les puede enseñar a recuperar objetos. Bolas de papel de periódico arrugado, pelotas de tenis o de ping pong son buenos juguetes para enseñar a tu gato a recuperar. Muchos gatos se sienten fascinados por las bandas elásticas y pueden perseguir a todos alrededor de la habitación. También disfrutan de ocultar y buscar, así como perseguir cadenas, sobre todo cuando son arrastradas por una persona dispuesta a jugar.
Advertencia: Asegúrate de recoger todas las bandas elásticas y cadenas cuando hayan terminado de jugar, para evitar que tu gato se las coma. Esto puede dañar seriamente su sistema digestivo.
Un último aspecto muy importante sobre el comportamiento del gato siamés. Ellos son vocales y comunicativos, algunos incluso dirían, que son manipuladores. Podrían entrenarte rápidamente para que interpretes sus órdenes.